Sunday, October 19, 2008

Catedral galopante

Como moneda
sembrado medio a medio en el arrozal que crece en tu pecho
se lanzan, zumban recuerdos verdes hacia el lugar donde se cierran mis labios.

Y como bomba lacrimógena
mudamente, verticalmente
voy a los pies, a los muebles
a las orillas de las camas.

Y estocado por el soplo célebre en esos labios,
húmedamente ciego
contemplo la estampida
que sigue tu sonido color aceitoso
catedral galopante.

2 comments:

Augusto Bueno said...

Buen poema. Esta vez vamos a acumular lo cierto de las catedrales...
Todo el blog es interesante... me gusta.

Augusto

Romayris said...

Excelente poema!

Saludos